Ayer soñé que soñaba, que la historia sucedió de otra forma, que la normalidad democrática no fue interrumpida por el odio y la violencia. Soñé que tuve la oportunidad de conocer a mi abuelo Vicente Lisero, que me hablo de su trabajo, era zapatero, oficio que aprendió de su padre, también zapatero, y con el que a fuerza de tesón y mucho trabajo, comenzó a labrarse un porvenir.
No sé en qué momento desperté, me hubiera gustado no despertar porque en los sueños todo es posible, que el sueño hubiera seguido y haber estado allí en aquellos trágicos momentos, poderle decir que no se quedara, que pusiera a salvo su vida, que no subiera a aquel camión que le llevaría a la muerte, seguir contemplando su mirada, la de él y la de unos hombres como Florentino, Teodoro, Antonio, Rafael, Aureliano, Saturio, que estaban llenos de deseos, llenos de rebeldía. Desgraciadamente, la realidad fue muy distinta porque algunos decidieron que fuera así, aunque eso ya poco importa. Todos son ya inmortales porque están en cada uno de nosotros, descendientes de una estirpe que en unas condiciones llenas de dificultades alumbraron un mundo mejor que no tuvieron la oportunidad de conocer y que me traen a la memoria las palabras que cierran el bellísimo libro de “Las uvas de la ira”: “NO PODRAN NUNCA CON NOSOTROS. NO PODRAN DESTRUIRNOS. SOMOS EL PUEBLO.
Premios a la memoria histórica, Máximo Calvo.
Viernes día 14 de Diciembre 20:00 horas en CORIA.
Organiza Juventudes Socialistas Provincia de Caceres.
GRACIAS POR SEGUIR MANTENIENDO VIVA LA LLAMA, GRACIAS POR DEVOLVERNOS LA MEMORIA, GRACIAS POR CREER EN UNA MEMORIA VIVA.
miércoles, 28 de noviembre de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
5 comentarios:
!Va por ellos, por el pueblo!.
Tengo que reconocer que por momentos se me erizó el pelo.
a mí también se me erizó
afortunadamente para este mundo y para la blogosfera no se nos ha erizado a la vez
allí estaremos y después todos a Aldeacentenera.
No faltaremos a la cita.
Por todos los que sufrieron la injusticia. Por todos los que lucharon contra ella. Por todos aquellos a los que no les quedó más remedio que subsistir en una España triste, oscura, tirana, injusta, llena de miedo y de pena.
Por todos aquellos que aún lo llevamos en la sangre, que se nos eriza el pelo, sí, y se nos encoge el estómago, y el corazón, cada vez que lo pensamos.
Y por todos aquellos que aún hoy, en este siglo XXI, siguen pasando lo que España afortunadamente ya pasó.
Estimado Héctor, tú y yo sabemos que esa carta dice mucho. Durante mucho tiempo hemos intentado recuperar aquello que nos habían quitado. Conseguimos recuperar testimonios que estaban ahí, pero que nadie había sacado a la luz. Por ellos, por nosotros, por el futuro. Allí estaremos
Publicar un comentario